Los clarinetes Greenline están hechos de un compuesto de madera, que carece de la estabilidad física de una estructura de madera cultivada. Este material es muy resistente a las grietas de madera tradicionales y tiene excelentes cualidades de sonido. Desafortunadamente, puede romperse en la espiga cuando se golpea o si el instrumento se cae. Por lo tanto, ofrecemos una espiga mejorada de metal especial que le da al cuerpo la estabilidad necesaria para reducir este riesgo.